San Expedito, bendito en los cielos y tierra,
tú que eres el patrón de las causas perdidas
y milagroso intercesor en los asuntos urgentes,
con toda mi fe y esperanza puesta en ti,
yo ......., con humildad y confianza, te suplico,
por favor, ven a mi auxilio, no demores en socorrerme,
"no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy".
tú que eres el patrón de las causas perdidas
y milagroso intercesor en los asuntos urgentes,
con toda mi fe y esperanza puesta en ti,
yo ......., con humildad y confianza, te suplico,
por favor, ven a mi auxilio, no demores en socorrerme,
"no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy".